Principios universales de Frecuencia Superior

1. Frecuencia y Vibración. Todo es energía. Nuestras emociones generan vibraciones de alta o baja frecuencia. Las emociones positivas como la alegría, la gratitud, el entusiasmo, elevan nuestra frecuencia vibratoria mientras que las emociones densas como son la envidia, los celos, culpabilidad, remordimiento, tristeza... bajan nuestra frecuencia vibratoria.
2. Milagros. El Universo está al mando cuando se trata de ayuda espiritual. Pueden ser coincidencias,  o sincronicidades, nos muestran que estamos por buen camino. Cuanto más elevada tu frecuencia vibratoria, más milagros ocurrirán en tu vida y sabrás que estás en el camino correcto.
3. Sanación. Las emociones reprimidas o de baja frecuencia se traducen en enfermedades. La curación se produce cuando energía de Alta Vibración atraviesa nuestro cuerpo transmutando los bloqueos vibratorios. Es importante estar conscientes de nuestro estado emocional y procurar siempre elevar nuestra frecuencia vibratoria. Tenemos el poder de vivir en equilibrio, de escuchar nuestro cuerpo, y pedirle que recuerde que somos saludables. También podemos ser canales para transmitir esa energía sanadora.
4. Purificación El aura es nuestro abrigo espiritual y es el reflejo fiel de nuestro estado vibratorio. Asuntos no resueltos, miedos, emociones reprimidas aparecen en el aura como puntos oscuros que pueden atraer bajas energías que se incrustan, o se alimentan de bajas vibraciones. Pueden aparecer en tu vida situaciones o gente que provocarán situaciones para recordarte o mostrarte esos temas no resueltos. Tendrás que recurrir a “detergentes” espirituales para limpiar y cerrar tu aura a toda intrusión.
5. Perspectiva Nada es lo que parece ser y sin embargo es un todo. No hay bien o mal, todo es cuestión de perspectiva y de nivel de conciencia. Cada desafío es una oportunidad de expandir nuestra perspectiva. Al quitarnos los filtros del juicio, podemos ajustar nuestra visión, ver con mayor perspectiva y claridad.
6. Gratitud Dar las gracias, expresar gratitud produce altas vibraciones. Cuanto más agradecido estés, la providencia te dará mayores oportunidades de sentirte agradecido. Haz de la gratitud un hábito, incluso cuando se trata de lecciones duras. Da gracias de corazón por todo lo que está en tu vida pues es la manifestación de tu poder personal divino.
7. Bendiciones La bendición es la proyección de una vibración altísima sobre las personas, lugares o situaciones. Cuando bendices desde el corazón eres la Divinidad en su máxima expresión. Bendice a todos y no olvides bendecirte también !
8. Decreto El poder del decreto es un contrato de co-creación con el universo que se pone en acción para cumplirlo, por lo tanto cuida tus palabras, cuida que tu decreto sea positivo y claro. Al expresarlo en voz alta, decreta con humildad, integridad, claridad y cuidado.
9. Fe La fé es una roca inamovible que disipa el temor. Es el espacio en que se crea para la manifestación del resultado de aquello que es por el mayor bien de todos los implicados, tener la certeza que todo está en el orden divino y abandonarnos al poder superior en nosotros. Sin embargo en la duda está la brecha, la falla. En la Fé es imprescindible estar en conexión constante con tu Yo Superior, con tu intuición. Recuerda que la fé ciega es un deseo sin fundamentos, por lo tanto construye fundaciones sólidas para tu fé.
10. Gracia. Amor incondicional, compasión, empatía son algunos de los instrumentos de la gracia para ofrecerlos libremente y de corazón a los demás. Fortalecen el corazón, y sanan las heridas. La gracia te brinda libertad, se manifiesta en ti y en todo lo que te rodea.
11. Unicidad. Todos somos una parcela de la esencia divina experimentando la materia, la dualidad, la ilusión de la separación. En realidad somos parte de un Todo llamado Fuente, Dios, Providencia o como quieras llamar esa energía de creación universal. Al aceptar este conocimiento reconoces tu propia Luz y también la de los demás. La Unicidad es aceptar tu divinidad.